martes, 29 de mayo de 2012

Cuesta barriga y un día Gris


El día no invitaba  a darle un paseo a mí aburrida moto, que no tenía acción desde la salida anterior a Quintay.  Ya  no llovía pero las nubes grises se asomaban amenazantes cada vez que miraba por me ventana buscando el momento de sacar a pasear a mi inquieta moto. Mire una vez mas, casi con resignación a quedarme en casa, cuando vi pasar a un niño en su bicicleta, feliz con la espalda mojada y embarrada completamente por acción de su rueda trasera, esa imagen fue la que produjo el quiebre entre lo que debía o quería hacer.
Hace rato que me intrigaba conocer la cuesta barriga, así que me abrigue un poco y salí. Sin ningún destino en específico solo andar y quizás mojarme un poco.


Tome camino a Rinconada de Maipú. El cielo gris, la calle mojada que reflejaba todo y gente que caminaba con cierto apuro o que al pasar me miraban como preguntándose ¿y este salio a mojarse  de puro gusto?. Como siempre he sido un poco enojon, anduve varios metros peleando solo, pensaba: y que le importa a la gente si aun me creo un niño y quiero salir a mojarme, después de un rato me di cuenta que iba peleando solo y me calme.

No pasaban siquiera cinco minutos desde que había salido de mi casa y ya me encontraba en un mundo totalmente distinto, el lugar ya era campo.

El olor a leña quemada me generaba cierta nostalgia que aun no descubro a que. A pesar que la calle estaba bien mojada en ningún momento tuve problemas con la estabilidad de la moto. Pase por una planta de tratamiento de aguas, creo que se llama El Trebal, que en realidad no me llamo la atención en nada, así que = no foto, ni más comentarios.

Seguí y pase una pequeña cuesta y después un camino largo y recto con varias viñas a sus costados al final del camino un par de cuervas y en seguida la cuesta barriga.


 Subí un par de kilómetros y la neblina rápidamente se comenzó a hacer presente, visibilidad a treinta metros, un poco mas allá visibilidad 10 metros.




 Hasta acá llegue, pare,  saque algunas fotos y me dispuse a volver. Ni hablar de fotografiar algún valle desde la cuesta, con esa neblina era imposible, pare varias veces para sacar alguna foto desde lo alto pero era imposible.
única oportunidad de fotografiar el valle.

El poco paisaje que se podía ver, era bastante bonito. Eso si, con cada parada que hacia me preguntaba si para mi el día era mas gris por las nubes o porque no había lugar del camino que alcance a recorrer que no tuviese basura, acaso no enseñan en este país a cuidar nuestro entorno? Para estas personas  es mas fácil botar la basura por la ventana del auto, que dejarla en el y sacarla al llegar a casa. Teniendo lugares cercanos que podrían ser espectaculares para pasear, estamos destinados a buscar lugares lejanos y escondidos para poder apreciar lo hermoso que es nuestro país. Señora, señor, jóvenes, demos el ejemplo y enseñemos a los menores a cuidar lo que nos rodea, sea una micro, un paradero o la esquina donde nos juntamos. No sea roto y no arroje basura por la ventana del auto o la micro, si llevas una mochila guarda tu papel ahí y luego lo botas en casa.





Con un día mas gris y mas  enojado que cuando me miraba la gente al salir de casa, volví a casa por el mismo camino de ida.