La verdad es que quise volver a casa haciendo la siguiente ruta: Radal- Alameda-Ruta 68-Cuesta Lo Prado-Cuesta Barriga-El Trebal-Camino Rinconada-Hogar, dulce Hogar.
La cuesta lo Prado, mitad pavimento, mitad tierra. A pesar de ser las 4 de la tarde y que el sol no tenia piedad, el fuerte viento me refrescaba y en mas de una ocasión me hizo temer lo peor cuando me movió la moto, así como si nada.
La mitad de tierra, polvorienta, seca, pero sin duda la mas entretenida.
Que verguenza!!! lamentablemente no es la única imagen vergonzosa y triste de hoy.
Un padre y su hijo. Quizás un futuro chaleco!!!
que elijen ustedes. ¿pavimento o tierra?
Me llamo la atención la cantidad de señaletica, en tan pocos metros...
Creo que acá perdí por lo menos media hora observando este partido, pichanga o como quieran llamarle, estaba entretenido, aunque el equipo amarillo no agarraba ni una. observe largo rato hasta que sentí que mi temperatura corporal subía y subía... olvide sacarme el casco, mi cara ya explotaba de calor.
Domingo de fútbol familias reunidas en torno a una cancha, quizás compartieron un asado, algunas historias de los mas viejos, chistes de los mas extrovertidos, quizás reírse de algún acompañante que se paso de copas y que no deja de dar jugo.
También habían espectadores desde la calle.
Y como estamos en Chile, se hizo presente el infaltable perrito en el terreno de juego, que no lo vea el Polaco Golberg!!!
Estas aves!!! Queltehue se llaman... por si no lo saben, los queltehues acostumbran a poner sus huevos en praderas, sin hacer nidos, solo ponen los huevos en algun lugar que asegure que no rodaran. debido a esta condición es muy común encontrarlos en canchas de fútbol plazas, y pastizales. Esto lo supe luego de que me atacaran, un par de queltehues, mientras recuperaba una pelota en el borde de una cancha, riducula situacion la mia, corriendo despavorido por la cancha con dos pajarracos persiguiéndome esto ademas acompañado con las carcajadas de mis compañeros de universidad. Desde ese momento se han convertido en unas de mis aves favoritas.
La cuesta Barriga, entretenida, bonita, pero descuidada... mucha basura a ratos... que pena!!!
Por fin en esta ocasión pude fotografiar estos valles que esconde la cuesta Barriga.
Al llegar a casa me di cuenta que estaba un poco deshidratado no por no llevar agua, sino que por flojera, por no sacarme el casco para tomar desde la botella.